La medicina Familiar es una especialidad netamente humanista, que involucra la relación entre dos personas, esta relación se basa en que una persona (PACIENTE) deposita su confianza en otra persona a quien reconoce como persona íntegra, honesta, profesional y empática, la cual asume la responsabilidad de brindar atención médica, integral, continua, anticipatoria con enfoque de riesgo en un marco de respeto mutuo basada en la ética y profesionalismo.